Como ejemplo de mente Brillante se me ocurre el
de Luís García Berlanga (1921-2010). Películas como “Bienvenido Mr Marshall" (1952) premiada en el festival de Cannes, “Plácido” (1961) donde denuncia la
hipocresía social de la época y nominada al Oscar como película extranjera, o
mi favorita, “El verdugo” (1963), premio a la Crítica en el Festival de
Venecia, se saltaron, nunca mejor dicho, a la torera, la censura de la época
que nos tocó vivir en España durante cuarenta años de dictadura. “Calabuch”, “Todos
a la cárcel”, “La vaquilla” y muchas películas más que hicieron las delicias del
espectador se rodaron cuando finalizó la época de la censura. En el festival de
Karloy Vary, Luís García Berlanga fue premiado como uno de los diez cineastas más
relevantes del mundo. Berlanguiana hasta la médula, me quito el sombrero ante
el Genio que hizo reír a la manera de la época, haciendo pensar a unos pocos muchos, dando un baño de realidad, mordacidad, ternura y talento.
Sin armas, sin sangre, sin gritos, solo con la risa. La ironía puede llevar a
cabo el alzamiento de miles de almas haciéndolas pensar a través de mensajes
encriptados en la risa. Ya veremos lo que nos depara el 12 de junio de 2021,
fecha en la que se abrirá el legado que depositó el Genio Berlanga en la Caja de las
Letras del Instituto Cervantes (antigua cámara acorazada de la sede central del
Instituto).
Hace unas semanas un amigo virtual de la red social donde cuelgo mis ocurrencias y las entradas de mi blog, compartió un artículo que me atrapó. Se trataba de Chico
Buarque, nacido en Brasil el 19 de junio de 1944, al que solo conocía por su música
brasileña, de la que no entendía nada porque no sé portugués.
Había una canción especial para mí: “A pesar de Vocé” tenía la magia de atraparme y arrancarme emociones con las
que me ponía a bailar de puro placer en mi casa cuando nadie me veía… me
transportaba a playas de arena blanca y aguas turquesas donde yo bailaba al
ritmo del carnaval de Brasil, donde no existía la oscura realidad que me tocó
vivir durante muchos años hasta que dije BASTA. No entendía su letra, solo
sabía que escucharla me llenaba de alegría y, sobre todo, de ESPERANZA.
El caso es que Chico Buarque no solo es cantante, sino poeta, guitarrista, compositor, dramaturgo y novelista, al que en mayo de 2019 se le concedió el premio Camoes. Buarque es uno de los más conocidos representantes de la llamada Música Popular Brasileña con un bagaje de más de cinco décadas. Es escritor de novelas, poesías, cuentos y obras de teatro. En casi todas las imágenes que he visto de él, además de ser un bellezón, casi siempre sale sonriendo con la boca y con sus ojos, tal vez, como un guiño de su militancia y compromiso social desde el contenido de sus obras. Tras el golpe militar en 1964, Buarque escribía sobre la situación evitando la censura utilizando analogías crípticas, juegos de palabras y su impresionante sonrisa. Fue arrestado en 1968 por su militancia y exiliado un año más tarde. Regresó a Brasil para continuar, desde su arte, su militancia contra la dictadura. Y fue durante los 70 cuando escribió la canción que me alegraba y daba esperanza, aun sin entenderla. “A pesar de Vocé” burló la censura y se convirtió en un himno de las luchas contra el régimen. Después de vender más de 100.000 copias la canción fue censurada y las copias que quedaban, retiradas del mercado. Podría continuar escribiendo durante horas sobre Chico Buarque y relatar todo el rosario de premios que ha obtenido a lo largo de su trayectoria como artista y, sobre todo, como persona, pero me quedo con que, por su alegría, inteligencia, genialidad y brillantez fue capaz de llegar a las masas con una canción que muestra lo terrible del estado totalitario de Brasil en esos años. Cuando todo estaba prohibido, a la censura se le pasó prohibir esta canción porque no la entendían. Dijo BASTA y fue un aliciente para su país. Todo, con una canción...
El caso es que Chico Buarque no solo es cantante, sino poeta, guitarrista, compositor, dramaturgo y novelista, al que en mayo de 2019 se le concedió el premio Camoes. Buarque es uno de los más conocidos representantes de la llamada Música Popular Brasileña con un bagaje de más de cinco décadas. Es escritor de novelas, poesías, cuentos y obras de teatro. En casi todas las imágenes que he visto de él, además de ser un bellezón, casi siempre sale sonriendo con la boca y con sus ojos, tal vez, como un guiño de su militancia y compromiso social desde el contenido de sus obras. Tras el golpe militar en 1964, Buarque escribía sobre la situación evitando la censura utilizando analogías crípticas, juegos de palabras y su impresionante sonrisa. Fue arrestado en 1968 por su militancia y exiliado un año más tarde. Regresó a Brasil para continuar, desde su arte, su militancia contra la dictadura. Y fue durante los 70 cuando escribió la canción que me alegraba y daba esperanza, aun sin entenderla. “A pesar de Vocé” burló la censura y se convirtió en un himno de las luchas contra el régimen. Después de vender más de 100.000 copias la canción fue censurada y las copias que quedaban, retiradas del mercado. Podría continuar escribiendo durante horas sobre Chico Buarque y relatar todo el rosario de premios que ha obtenido a lo largo de su trayectoria como artista y, sobre todo, como persona, pero me quedo con que, por su alegría, inteligencia, genialidad y brillantez fue capaz de llegar a las masas con una canción que muestra lo terrible del estado totalitario de Brasil en esos años. Cuando todo estaba prohibido, a la censura se le pasó prohibir esta canción porque no la entendían. Dijo BASTA y fue un aliciente para su país. Todo, con una canción...
El Premio Camões que Buarque recibió el año pasado es
un premio instituido en 1989 por los gobiernos de Brasil y de Portugal. Es el
principal premio literario destinado a los autores que, por el conjunto de su
obra, hayan aportado al enriquecimiento del patrimonio literario y cultural de
la lengua portuguesa. La entrega del premio se alterna anualmente entre Brasil
y Portugal. Entre otras figuras destacadas que lo ganaron se encuentran los
escritores Jorge Amado y José Saramago.
Sí... yo le estoy muy agradecida a la risa. La risa me ha salvado la vida. Cuando
alcanzas la guapeza de convertir la tragedia en comedia, sin duda, se produce la Sanación. Hace unos días, en las noticias se informó del
asesinato de otra mujer a manos de su torturador secreto. Entre las virtudes de la víctima el locutor resaltaba que nunca denunció a su verdugo y que en sus redes
sociales ponía mensajes tipo llevar el sufrimiento en silencio como una
heroicidad. Debe ser porque vivimos en una sociedad hipócrita que se lleva las
manos a la cabeza mientras la gira hacia el otro lado. Pero lo que no se dice no
se sabe. No siempre se han tenido las “ventajas” de hoy en día para
denunciar cualquier tipo de maltrato o abuso de poder. A lo mejor no se
denuncia porque muchas de esas “ventajas” están maquilladas por un pseudo feminismo
que se abandera para ganar votos. Al final todo lo envuelve la política. A
veces, deberíamos recurrir a la lógica para comprender que nuestro miedo empodera al opresor. Callar, a menudo, no es algo meritorio. A veces hay demasiado miedo para tan poco peligro y, aunque guardar silencio en el momento
oportuno es una virtud, también hay que estar preparado para gritarle a los
cuatro vientos la verdad, y reírse en la cara del menda sin que ni siquiera se dé cuenta. Para eso tenemos grandes Maestros como B&B, (Berlanga y Buarque), es un suponer.
Más de uno se llevaría una sorpresa
de lo que se puede conseguir con reírse del miedo que trata de provocar un opresor, del tipo
que sea, porque de esa forma queda al descubierto su cobardía y salen a la luz pusilánimes, acomplejados, patanes, torpes, cornudos, ignorantes,
aprovechados, narcisistas, mentirosos compulsivos, estafadores, oscuros, grises, sin ingenio,
horteras, falsos, a los que desde hace tiempo solo se me ocurre calificar como “Bragas
Tristes”.
Sí... yo hoy, más que nunca, le estoy muy agradecida a la risa. Ya no empleo palabras mal sonantes para lo que no solo no vale la pena, sino que provoca la risa. A borbotones, a carcajadas, por haber sobrevivido a tanta cochambre. A pesar de vocé, sigo aquí. Que le den a todos los Bragas Tristes. Disfrazados, que vegetan en vez de vivir, en este, ahora sí, maravilloso mundo. Gracias, amigo, por mostrarme en el artículo que colgaste, no solo la cara desconocida para mí de Chico Buarque, sino que la canción que yo bailaba sin comprender el significado de su letra es un himno a la Esperanza, la brillantez y a la alegría. Un himno que hoy me apetece compartir con todo el mundo.
Sí... yo hoy, más que nunca, le estoy muy agradecida a la risa. Ya no empleo palabras mal sonantes para lo que no solo no vale la pena, sino que provoca la risa. A borbotones, a carcajadas, por haber sobrevivido a tanta cochambre. A pesar de vocé, sigo aquí. Que le den a todos los Bragas Tristes. Disfrazados, que vegetan en vez de vivir, en este, ahora sí, maravilloso mundo. Gracias, amigo, por mostrarme en el artículo que colgaste, no solo la cara desconocida para mí de Chico Buarque, sino que la canción que yo bailaba sin comprender el significado de su letra es un himno a la Esperanza, la brillantez y a la alegría. Un himno que hoy me apetece compartir con todo el mundo.
A PESAR DE
VOCÉ (A PESAR DE USTED)
Mañana va a ser otro día...
Hoy es usted el que manda, lo dijo, está dicho, es sin discusión, ¿no?
Toda mi gente hoy anda hablando bajito mirando el rincón, ¿vio?
Usted que inventó ese estado e inventó inventar toda la oscuridad
Usted que inventó el pecado, se olvidó de inventar el perdón.
A pesar de usted mañana ha de ser otro día
Yo quisiera saber dónde se va a esconder de esa enorme alegría
Cómo le va a prohibir a ese gallo insistir en cantar
Agua nueva brotando y la gente amándose sin parar
Cuando llegue ese momento, todo mi sufrimiento cobraré, seguro, lo juro
Todo ese amor reprimido, ese grito mordido, esa samba en lo oscuro.
Usted que inventó la tristeza, tenga hoy la fineza de desinventar
Usted va a pagar, doblemente pagada cada lágrima brotada desde mi penar.
A pesar de usted mañana ha de ser otro día
Todavía pago por ver el jardín florecer como usted no quería
Cuánto se va a amargar viendo el día asomar sin pedirle licencia
¡Cómo voy a reír! que ese día ha de venir antes de lo que usted piensa.
A pesar de usted mañana ha de ser otro día
Tendrá entonces que ver al día renacer derramando poesía
Cómo se va a explicar ver el cielo clarear de repente, impunemente
Cómo va a silenciar nuestro coro al cantarle bien de frente
A pesar de usted, mañana ha de ser otro día
Usted va a quedar mal, sin poder deleitar... laraia lalala...
Usted va a quedar mal, sin poder deleitar... laraia lalala...
- Chico Buarque
Genial!
ResponderEliminar¡Muchas gracias! Que la risa te acompañe. Un abrazo.
EliminarMe gustó lo que he leído. Muy interesante.
ResponderEliminarMis felicitaciones, Amanda.
Me alegra que te haya gustado, Helio. Siento la tardanza en responderte, tu comentario entró como spam. Muchas gracias por tus palabras, un afectuoso saludo.
EliminarQue saludable es poder reírse sin un gran motivo. Excelente
ResponderEliminarY tanto. La risa es vida... Muchísimas gracias por tu comentario, siento la tardanza en responder, entró como spam. Un afectuoso saludo.
EliminarHace muchos años tuve una amiga q me contaba los problemas q tenia con su marido y padre de sus tres hijos, a veces me costaba conciliar el sueño pensando en su infortunio. Pero cuando te he leído, me ha recordado q a pesar de todo, mi amiga siempre tenía una sonrisa y ganas de vivir, y me has ayudado a entenderla.
ResponderEliminarHace algún tiempo me la encontré y está estupenda, salió de aquello.....
Claro que sí. La risa, la actitud y las ganas de vivir, son nuestras grandes aliadas. En todos los casos, yo creo que el que cada uno/a lleve o arregle su vida como puede, no significa que sea un trabajo puntual, sino día a día. Gracias por tu sensibilidad y empatía. Muchas gracias por tu comentario, Jeanda, me ha gustado mucho. Tanto como conocerte y que formes parte de mi vida. Un abrazo muy grande y hasta pronto.
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